HÁBITOS DE ESTUDIO


Cuando hablamos de agilidad mental en un estudiante, ésta puede estar condicionada más por su motivación que por sus capacidades mentales.

Es importante la aplicación de unas buenas técnicas de estudio que le permitan corregir ciertos hábitos para así mejorar o reforzar su rendimiento académico, que le llevarán a tener éxito en su labor estudiantil.

La motivación y las técnicas de estudio pueden hacer que un estudiante supere año tras año con brillantez sus estudios sin estar dotado de unas cualidades mentales específicas que le hagan diferente a los demás.

Estas son algunas preguntas y respuestas que deben ser parte de un buen estudiante:

      - ¿Mantengo hábitos regulares? SI

      - ¿Planifico mi tiempo: día, semana,...? SI

      - ¿Me ajusto a lo planificado? SI

      - ¿Me cuesta trabajo ponerme a estudiar? NO

      - ¿Hablo de mi tiempo libre de mis estudios, con mis amigos, mi familia? SI

      - ¿Tengo ordenado mis materiales de estudio: Libros, apuntes,...? SI

      - ¿Presto atención a los títulos, subtítulos cuando leo un capítulo? SI

      - ¿Estudio hasta altas oras de la madrugada? NO

      -¿Suelo repasar mis apuntes aunque no tenga exámenes o tareas? SI


Si tus respuestas han sido las que están en este artículo, sin duda eres un buen estudiante y obtendrás buenos resultados.

Cualquier estudiante puede mejorar su rendimiento en el estudio si se preocupa por dominar un conjunto de técnicas que favorezcan su eficiencia en el aprendizaje ligados a un conjunto diverso de factores.

Los métodos y técnicas de estudio te pueden convertir en un excelente estudiante y te permitirán descubrir nuevas potencialidades en ti que no te imaginabas.


ESTUDIO: LA PLANIFICACIÓN DE TU TIEMPO

Este aspecto es muy importante para lograr nuestras metas. ¿Ajusto mi trabajo a un horario? ¿Adopto con regularidad mis tareas día a día?
Diez minutos perdidos "tontamente" cada día equivalen a ¡60 horas desaprovechadas al año!

¿Tienes un horario y un plan de trabajo para cada día y te ajustas a él?

      a.- Plan de trabajo.-
Un buen estudiante debe tener cada día un horario y un plan de trabajo y, obviamente ajustarse a él.

Los estudiantes malos generalmente no planifican. Siempre encuentran una excusa para dejar las tareas, deberes y estudio para última hora. No le dan prioridad al estudio. Además lo suelen dejar como algo residual. En sus lista de prioridades están otras cosas. Cualquier excusa es buena para dejar los estudios.

El plan de trabajo es una "declaración de principios". Es tu apuesta por ser un buen estudiante.

- Has decidido nada más llegar ponerte a estudiar y hacer los deberes porque es importante para ti y te has comprometido. 
- De esta forma, al ser parte de tus prioridades, si te falta tiempo, porque no lo has calculado bien, siempre puedes recurrir a "horas extras" y subsanarlo.

- Cuando has terminado tu estudio y deberes, puedes descansar mejor.

Se ha de comenzar por un análisis de las costumbres personales. Desde que nos levantamos hasta que nos acostamos, incluyendo las horas que pasamos en la cama, así te aconsejamos que te hagas un horario con todo lo que haces durante el día, por cada día de la semana, al verlo por escrito serás más consciente de cuáles son tus actividades y de si todas son realmente importantes.

Tras una semana analizando en que empleas cada hora de tu tiempo, estarás en condiciones de conocer el tiempo que malgastas y de hacer una reflexión personal de si la distribución de tu tiempo está acorde con tus necesidades, prioridades u objetivos.

      b.- Consejos.-


      - Diseña un plan con lo quieres alcanzar cada curso o cada año.
      - Planifica el horario de cada semana y de cada día, intentando con fuerza cumplir el plan que te has trazado.
      - Lleva un diario en que apuntes todas las incidencia que sean importantes en el cumplimiento de lo que planificas.
      - Procura que tu familia, amigos y compañeros te ayuden a respetar el Plan. Hazlo público. Propóntelo como un reto personal.
      - Evita el horario nocturno, especialmente las últimas horas de la noche
      - Dedica mayor cantidad de horas a las asignaturas o tareas que sean más complejas y difíciles, aunque no sean tus preferidas.
      - Es importante intercalar breves períodos de descanso cada hora de estudios (descansar 5 minutos). Algún movimiento físico moderado puede ser muy recomendable.


PERDER EL TIEMPO.-

Generalmente los malos estudiantes son especialistas en perder el tiempo, veamos los siguientes cálculos:

      * Si pierdes 1 minuto cada día, son 6 horas al año.
      * Si pierdes 5 minutos cada día, son 30,4 horas al año (más de un día entero).
      * Si pierdes 1 hora cada día, son 365 horas al año (más de 15 días enteros).
      * Si pierdes 2 horas cada día es un mes entero perdido.
      * Si pierdes 3 horas cada día son 1.095 horas perdidas (un mes y medio), casi tanto tiempo como todas las vacaciones del verano...

Es por ello que debemos analizar cuánto tiempo puedes ganar al día, horas, minutos, segundos en los que puedes aprovechar tu tiempo mucho mejor. A veces, esperando un autobús se puede hacer algo provechoso. Mientras estás sentado en el autobús puedes repasar un esquema.


PLANES.-

Es importante realizar planes diarios y semanales para estudiar.

Al principio los planes diarios serán imprescindibles. Recuerda que debes abandonar los viejos hábitos y formar otros distintos que sean compatibles con tus nuevos objetivos de estudio y aprendizaje. Recuerda que un hábito nuevo se forma con la repetición.

Por tanto, deberás controlar tu esfuerzo y constancia cada día para que a fuerza de repetir los nuevos hábitos llegue un momento que el estudio y la concentración no te cuesten ningún esfuerzo. 

Para realizar los planes diarios toma una ficha y planifica el día desde que te levantas hasta que te acuestas. Recuerda que te has propuesto no perder tiempo, ¡ni un minuto del valioso tiempo de tu vida!.

Piensa por tanto cómo puedes aprovechar mejor cada segundo del día, tanto para estudiar como para descansar y recuperarte.

Diseña una Planificación diaria detallada, hora por hora.


      a.- Consejos para hacer horarios y planes:

      - No te importe detallar actividades que debes realizar en cinco o diez minutos. Esto es, divide las horas si es necesario en fragmentos de tiempo más pequeños.

      - Sé exigente y procura ahorrar tiempo en los tiempos muertos (esperas de autobús, tareas, interrupciones ocasionales, llamadas de teléfono, etc.)

      - Piensa en cómo organizarte mejor para ahorrar tiempo y hacer las tareas de estudio cuando estás en mejor forma. Por ejemplo, ducharte, dejar las cosas preparadas por la noche cuando estás cansado y así aprovechar mejor el valioso tiempo de las mañanas, etc.

      - Dedica y dale prioridad a las horas que sean necesarias para el estudio y ponte controles cada media hora sobre tu rendimiento.


      b.- Consejos para planes semanales:

      - Dale prioridad a las horas de estudio que necesites para sacar holgadamente tu curso. No hagas un plan de mínimos. Si luchas por lo sobresalientes y te equivocas, sacarás un notable, o en el peor de los casos un aprobado. Pero si estudias para aprobar quizás te lleves una desagradable sorpresa la final del curso y coseches algún suspenso. No corras riesgos. Merece la pena ser un buen estudiante.

      - Respeta unas horas de sueño fijas (aconsejables ocho, nunca menos de siete). La pérdida de sueño continuada, llegará un momento que te reducirá tu capacidad para estudiar. Sigue un orden en las comidas. No hagas comidas copiosas antes de tu horas de estudio, te entrará sueño y perderás capacidad de esfuerzo y concentración.

      - Stop tentaciones. Sé muy severo a la hora de cortar con las actividades que te retienen y te hacer perder horas de tiempo: TV, Messenger, Móvil... Cumple tu plan y dedícales un tiempo muy limitado a las distracciones hasta que hayas fortalecido tus nuevos hábitos.

CONTROLAR Y EVALUAR TU RENDIMIENTO EN LAS HORAS DE ESTUDIO.-

Es fundamental como hemos dicho controlar tu esfuerzo y constancia. No bajar la guardia. ¿Cómo controlar tu rendimiento durante las horas de estudio? Dependerá de la materia que estudies. Si son cosas que debes aprender más bien de memoria controla el número de páginas que repasas, memorizas o aprendes. Si son de comprensión asígnale unos minutos e intenta ajustarte a ese tiempo.

Si cumples con los previsto anota en la ficha "OK". Si no cumples anota "No". Obviamente, tu objetivo debe ser sacar en todos tus controles "OK". Si fallas debes analizar porqué.

No te desanimes si al principio no cubres tus objetivos. Sé paciente y constante. Al final te si te sigues esforzando con constancia te ocurrirá lo contrario: acabarás antes de lo que has planificado. Recuerda: no te rindas nunca.

Dios te bendiga y te ayude a tener unos buenos hábitos de estudio.





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